El dermatofibroma es un bulto benigno frecuente en la piel que suele aparecer en las piernas, pero que puede aparecer en cualquier parte del cuerpo. El bulto es firme al tacto, a veces de color marrón o rosado, y puede estar en la parte superior de la piel. A menudo, los dermatofibromas miden entre unos milímetros y un centímetro. Se desconoce la causa exacta, pero probablemente se producen tras un pequeño daño en la piel. Piense en una picadura de insecto, una astilla o una herida, donde el cuerpo reacciona con una reacción inflamatoria que provoca esta mancha cutánea. Característico de un dermatofibroma es el "signo del hoyuelo", en el que se pellizca el lado de la protuberancia y ésta se hunde en la piel.
Siempre es aconsejable consultar a un médico para obtener un diagnóstico y un tratamiento adecuados si descubre una mancha cutánea sospechosa. Por lo demás, un dermatofibroma no requiere tratamiento, pero a veces resultan estéticamente molestos o causan incomodidad. Estas manchas cutáneas pueden extirparse quirúrgicamente, pero recuerde que la cicatriz puede ser más perceptible que la mancha cutánea original.
Ejemplo de foto de un dermatofibroma